¿Ha pilotado alguna vez un caza de reacción por el Río de No Retorno para hacer explotar aviones cisterna, helicópteros, reactores y puentes enemigos? Entonces conoce el trabajo de Carol Shaw, la pionera de los videojuegos.

Shaw es la diseñadora y programadora del clásico juego River Raid, publicado por Activision en 1982 para la consola de videojuegos Atari 2600. El juego de Shaw, gracias en parte a su complejidad, efectos visuales y, por supuesto, diversión, llegó a vender más de un millón de cartuchos. La crítica lo aclamó como uno de los mejores juegos para Atari 2600.

Este fue solo uno de los muchos éxitos que Shaw cosechó durante una carrera relativamente breve, pero importante desde una perspectiva histórica, en los videojuegos y la programación. Shaw empezó a trabajar en Atari en 1978 como ingeniera de software de microprocesadores y The Centre for Computing History la nombró la primera mujer diseñadora y programadora de videojuegos.

Shaw es clave en la historia de las mujeres en la tecnología y allanó el camino a muchas otras en el diseño de videojuegos.

Su evolución con la tecnología

Shaw nació en 1955 y estudió en la Universidad de California, Berkeley, donde se licenció en Ingeniería Eléctrica e Informática en 1977. También completó su máster en Berkeley.

River Raid no fue el único videojuego que Shaw programó en Atari. Desempeñó un rol decisivo en la materialización de juegos clásicos de Atari 2600 como 3D Tic-Tac-Toe o Video Checkers. También colaboró en la versión para Atari 2600 del juego arcade Super Breakout y contribuyó a convertir el clásico juego de mesa Otelo en otro cartucho para Atari 2600.

Durante la carrera de Shaw, Atari se introdujo en la informática doméstica con la familia de ordenadores personales Atari de 8 bits. Shaw escribió el Manual de referencia de Atari BASIC para estos ordenadores. Además, desarrolló la aplicación Calculadora programable que Atari publicó para estos ordenadores en 1979.

En una entrevista de 2011 con Vintage Computing and Gaming, Shaw atribuyó a su educación su interés por los videojuegos y los ordenadores. Creció en un hogar en el que la tecnología era diversión, aseguró al entrevistador Benji Edwards. En la escuela, destacó en Matemáticas. Era evidente que Shaw estaba destinada a estudiar Informática y Programación.

Sin embargo, eran los años 70 y no había muchas mujeres en carreras tecnológicas. Este hecho no amedrentó a Shaw.

«Me presenté a muchos de concursos de matemáticas y gané premios», afirmó Shaw durante la entrevista. «Por supuesto, la gente decía: "Vaya, se te dan bien las matemáticas, para ser una chica". Aquello me molestaba. ¿Por qué las chicas no iban a ser buenas en matemáticas?».

El nacimiento de River Raid

Shaw dejó Atari en 1980 y se incorporó a Tandem Computers. No obstante, fue dos años más tarde, cuando dio el salto al desarrollador de juegos Activision, cuando Shaw disfrutó de su mayor éxito en la industria del videojuego.

Diseñó y desarrolló River Raid, uno de los videojuegos domésticos de más éxito de los 80. Este título, que vendió más de un millón de copias, presentaba una jugabilidad y unos gráficos avanzados para la época, sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de información que Shaw tenía que incorporar en un cartucho que funcionase en la relativamente poco potente Atari 2600.

Un factor importante que tener en cuenta es que muchos de los juegos diseñados para la Atari 2600 se parecían muy poco a lo que se suponía que representaban. Por ejemplo, los jugadores representados en el primer partido de fútbol americano del Atari parecían más bien cubos de basura con ojos que corredores y defensas de la NFL. La versión de Pac-Man de la 2600 también fue objeto de burlas por sus fantasmas que parpadeaban en la pantalla y sus «puntos», que más bien parecían rayas.

¿Y en River Raid? Los aviones, helicópteros, puentes, tanques de combustible y barcos se parecían a los de la vida real o, al menos, eran lo más parecidos que un diseñador podía lograr en la 2600. El juego obtuvo varios premios de la industria, entre ellos el de Mejor videojuego de acción en los Arkie Awards de 1984 de la revista Electronic Games.

No es de extrañar que River Raid se convirtiera en todo un éxito. Los propietarios de otros sistemas de juego también lo solicitaron y Shaw creó versiones de su clásico juego para la competidora de la Atari 2600, la Intellivision, y para el sistema informático Atari de 8 bits.

El trabajo de Shaw en este juego, y en sus otros proyectos, la convirtió en la primera mujer diseñadora de juegos en entrar en el Salón de la Fama de la Academia de las Artes y las Ciencias Interactivas. En 2017, obtuvo el premio Industry Icon de The Game Awards.

Una misión insólita

Uno de los momentos más extraños de la carrera de Shaw tuvo lugar en 1978. Atari le pidió que diseñara un videojuego basado en el polo, el deporte en el que los jinetes a caballo intentan marcar goles al contrario con mazos de madera de mango largo.

Eso no es lo inusual. Lo extraño es que el partido debía servir para la presentación de Polo, una fragancia para hombres del diseñador de moda Ralph Lauren. En aquel momento, Warner Communications era propietaria de Atari y de Ralph Lauren. Warner quería crear un expositor en la emblemática tienda Bloomingdale's de Nueva York con la colonia Polo junto a consolas Atari 2600 que mostraran el juego de polo de Shaw.

El juego fue otro desafío. Obviamente, la Atari 2600 no estaba diseñada para una adaptación tan compleja de un deporte. Sin embargo, Shaw efectuó un trabajo impresionante. Y los críticos lo confirman. Según ROMchip, Shaw dedicó muchas horas a investigar el deporte del polo y física para poder crear un juego lo más realista posible. Esto incluía programar movimientos realistas de la pelota de polo después de que los jugadores la golpearan con sus mazos.

Por desgracia, Warner cambió sus planes y nunca publicó el juego; por lo tanto, la fragancia Polo se lanzó en solitario. Sin embargo, no fue el final del juego. En 2017, Shaw donó el chip de memoria de solo lectura original y el código fuente impreso del juego a The Strong National Museum of Play en Rochester, Nueva York.

Los fans lanzaron el juego en 1996 como bonus del CD-ROM Stella Gets a New Brain, un disco compacto que contenía 13 juegos. De este modo, los fans de la Atari 2600 ya pueden jugar al juego que desarrolló Shaw. Hacerlo es algo histórico: Polo se considera el primer videojuego documentado diseñado y programado por una mujer.

Shaw también programó el bien recibido juego Happy Trails para la Intellivision, una de las mayores rivales de la Atari 2600. Shaw programó el juego en 1983 mientras trabajaba para Activision. En este juego de temática del Oeste, los jugadores guían a sus personajes a través de un laberinto roto para recoger oro mientras evitan a Black Bart, con su sombrero negro.

Este juego de rompecabezas también recibió críticas muy favorables, y la revista JoyStik le otorgó una puntuación de cinco estrellas sobre cinco. Los jugadores que obtuvieran una puntuación de 40 000 o más podían recibir un emblema de Activision Trailblazers si enviaban a la empresa una foto de su pantalla con la puntuación.

A pesar de los éxitos que cosechó, Shaw tuvo una corta carrera en la industria de los videojuegos. En 1984 dejó por completo el diseño de juegos y en 1990 se jubiló en Tandem Computers, donde había trabajado como programadora de lenguaje ensamblador. Shaw atribuye el éxito de River Raid al colchón financiero que necesitaba para jubilarse anticipadamente.