Olga Petrova, investigadora de aprendizaje automático en Avast, sobre inteligencia artificial y su aplicación en las relaciones humanas.
Rajesh Koothrappali, irremediablemente enamorado del asistente de voz de Siri en la serie Big Bang Theory en el episodio "Iniciación en las pruebas beta", es sin duda un espectáculo divertido. Pero, ¿y si realmente pudiéramos enamorarnos de los chatbots? La inteligencia artificial que da vida a los chatbots, probablemente una vez, y no por mucho tiempo, puede emular a tus amigos, tal vez incluso a tus compañeros.
Avances en inteligencia artificial.
Uno de los avances más significativos es, sin duda, la invención de la nueva arquitectura de la red neuronal artificial "Transformador". Puede predecir otras palabras consecutivas en el texto solo por contexto. Y puede usar esta habilidad al revés, para poder escribir respuestas significativas basadas en el contexto de una conversación anterior. Es esta habilidad la que da a las personas la impresión de que se están divirtiendo con una entidad inteligente.
Otra habilidad importante que las máquinas ya controlan hoy en día es aprender directamente de la conversación con los humanos. Gracias a esto, las habilidades de comunicación del chatbot en teoría podrían actualizarse después de cada conversación. Esto también significa que mientras más personas hablen con el chatbot al mismo tiempo, mejor para él, ya que tendrá más datos para mejorar sus habilidades de comunicación.
Pero falta una pieza del rompecabezas
Por el momento, sin embargo, todavía se vislumbra una relación más profunda con la inteligencia artificial. No puede entender el tema de la conversación que está teniendo con el chatbot y ni siquiera entiende la personalidad de la persona. Aunque un chatbot está entrenado para tener conversaciones significativas, no está diseñado para comprender el significado profundo del tema del que está hablando. Es por eso que las conversaciones de chatbot tienden a ser aburridas y superficiales. Lo cual no es tan sorprendente. No puede hacer la conversación habitual con sus amigos respondiéndoles en una palabra o en oraciones cortas más o menos aleatorias. Pero los chatbots se comunican con este estilo muy a menudo, al menos según mi experiencia con ellos.
A veces, los chatbots logran mostrar sus propias personalidades, y es en esos momentos que parecen ser los más amigables y más similares a las personas. Sin embargo, durante una conversación larga, generalmente no pueden mantener su personalidad. Esto se debe a que su algoritmo genera respuestas basadas en el contexto más actual. Y diferentes contextos resultan en la creación de diferentes respuestas. Sin embargo, esta parte de la investigación está en constante evolución y los algoritmos son cada vez mejores.
¿Cómo imprimir inteligencia artificial en las emociones humanas?
Para que los investigadores puedan enseñar inteligencia artificial para comprender las emociones humanas, deben presentar una gran cantidad de texto marcado con diferentes emociones. Y eso, por supuesto, implica mucho trabajo, razón por la cual estos textos no están muy disponibles. También es el lugar donde se divide el aprendizaje de las emociones y el aprendizaje del lenguaje. Chatbot puede aprender el idioma incluso sin datos marcados, aprende usando muchos textos. Sin embargo, ya hay algunos zapatos que entienden las emociones humanas. Un ejemplo es el chatbot chino Xiaolce.
Enseñar inteligencia artificial a las emociones humanas es un paso necesario que no se puede perder. Las emociones expresadas en una conversación pueden cambiar el valor informativo del mensaje. Por ejemplo, la oración: "¡Pero fue un día!" Se puede entender de varias maneras. Solo depende de cómo lo pronuncies, cuál sea tu estado de ánimo. La oración puede expresar así una frustración por un día corrupto, o por el contrario puede ser una proclamación de entusiasmo. La inteligencia artificial debe comprender estas diferencias de significado, por lo que debemos enseñarle a comprender las emociones humanas.
El lenguaje emocional es en realidad otro idioma que los bots deben aprender a hablar con fluidez. Al igual que con el aprendizaje de idiomas, los datos emocionales deben presentarse a los zapatos uno por uno y deben aprender a predecir las "otras emociones" de su contraparte conversacional. También sería práctico involucrar videos en los que uno habla en el proceso de aprendizaje. El chatbot podía leer las emociones de su discurso.
Un romance con inteligencia artificial.
La gente simplemente forma una relación con personajes de ficción. No podemos evitarlo, es natural para nosotros atribuir cualidades humanas a cosas inanimadas o personajes de ficción con los que tenemos contacto. Incluso hoy, algunos pueden percibir la inteligencia artificial como sus amigos, compañeros, incluso socios. Sin embargo, la profundidad de la relación con la inteligencia artificial depende de la madurez de su tecnología. En otras palabras, depende de qué tan bien la tecnología pueda imitar la comunicación humana. Con los avances en el procesamiento del lenguaje natural, los chatbots también mejorarán. Incluso pueden alcanzar un nivel tal que no podremos reconocer cuándo estamos hablando con una persona y cuando tenemos inteligencia artificial.
La tecnología detrás de los chatboats ya tiene una amplia gama de aplicaciones diferentes. Se puede usar fácilmente para obtener ganancias financieras, que siempre es un requisito previo importante para el éxito futuro. Es por eso que las empresas y los investigadores están invirtiendo cantidades increíbles de dinero y mano de obra en esta tecnología. Y cuando considero la velocidad a la que se desarrolla esta industria, supongo que haremos un gran progreso dentro de 10 años. Pero, ¿significa esto que las personas, o mejor dicho, más personas que hoy, estarán románticamente involucradas con la inteligencia artificial? Tal vez. Pero tal vez no. Después de todo, ya veremos pronto.
