La época del Internet de las cosas: 6 formas de protegerse

El Internet de las cosas es muy prometedor, pero también da lugar a más ciberamenazas, así que conviene protegerse.

Hay ciberintrusos que espían a niños y padres a través de los monitores para bebés. Las cerraduras inteligentes de cientos de hogares fallaron tras una actualización de software. Varios cibervillanos usaron malware para robar datos personales y cotillear por las webcam. Hay acosadores que rastrean a sus víctimas mediante el spyware que tienen en el teléfono.

Si bien el Internet de las cosas (IoT) es muy prometedor y puede, en muchos casos, facilitarnos la vida, su uso acarrea un coste. Los dispositivos que llevamos en los bolsillos y metemos en casa controlan el acceso a nuestras posesiones y a nuestros datos personales más íntimos. En las manos equivocadas, esos aparatos tienen el poder de poner en riesgo nuestra integridad física.

Atrás quedaron los tiempos de las primeras ciberamenazas, cuando para infectar el PC de alguien con un virus había que entregarle un disquete. Internet ha hecho que instalar malware y transmitir virus sea mucho más fácil. Hoy en día, los ciberdelincuentes utilizan herramientas automatizadas para atacar a millones de dispositivos a la vez. Si miramos al futuro, vemos las casas conectadas inundadas de dispositivos. La empresa de investigación Gartner calcula que en 2020 habrá más de 20.000 millones de dispositivos conectados, la mayoría de los cuales pertenecerá al segmento de consumidores. Cada dispositivo ofrece un punto de acceso para un ataque. Si, por poner un ejemplo, alguien manipulara el termostato inteligente de nuestra casa, podría quedar expuesta la información de todos los dispositivos conectados a la red. Podemos considerar el IoT como una cadena cuyo grado de solidez viene determinado por el eslabón más débil.

Debido a que cada vez dependemos más de la conectividad, es crucial mantenerse alerta. Aquí proponemos seis sugerencias para proteger la red del Internet de las cosas y al propio usuario.

1. Protege la red doméstica

Cuando la red doméstica está protegida, los datos también lo están. Se pueden adoptar varias medidas para lograr mantener a raya a los posibles ladrones. Primero, hay que asegurarse de tener instalado el firmware más reciente en el router y de haber cambiado la contraseña predeterminada. Después hay que ocultar la red para que pase inadvertida. Cambia la contraseña del wi-fi frecuentemente para evitar los ciberataques. Consejo extra: desactiva el wi-fi cuando no lo estés usando. ¿Todavía tienes dudas sobre tu seguridad? Inspector de Wi-Fi de Avast analiza la red doméstica, identifica vulnerabilidades y te explica las acciones que debes llevar a cabo.

2. Crea una red «invitada» para todos los dispositivos conectados

De este modo, si la tostadora u otro aparato conectado es blanco de un ataque, no servirá de portal de entrada al PC, el teléfono u otra tecnología que pueda dar acceso a información confidencial.

3. Gestiona los dispositivos conectados

Recuerda las situaciones expuestas al principio de este artículo, que sirven de ejemplo para mostrar que el Internet de las cosas se puede usar en contra del usuario. Si deseas evitarlas, puedes empezar investigando por tu cuenta y buscando dispositivos que procedan de marcas de prestigio y hagan de la ciberseguridad una prioridad. Para salvaguardar tu privacidad, desactiva las cámaras y los micrófonos que no se estén usando. Si los aparatos reciben actualizaciones de software, instálalas, ya que podrían mejorar la seguridad. Y crea siempre contraseñas seguras para las cuentas y los dispositivos, incluidas las tecnologías del Internet de las cosas (Administrador de contraseñas resulta útil para crear y almacenar una contraseña segura).

4. Usa una VPN

Una red privada virtual (VPN) impide que otras personas puedan ver lo que haces en la red. Protege la conexión a Internet y cifra los datos que se envían, con lo que la privacidad queda garantizada. Al usar redes wi-fi fuera de casa, ya sea en una cafetería, un aeropuerto u otro lugar, asegúrate de usar una VPN, como Avast SecureLine VPN, para garantizar la privacidad de las comunicaciones. Sin una VPN, cualquier información que envíes y recibas, incluyendo las contraseñas y los datos personales, podría caer en las manos equivocadas. (Para obtener más información, lee la publicación «Ocho razones para usar una VPN»).

5. Protege los ordenadores y los dispositivos móviles

Virus. Spyware. Malware. Ransomware. Todas estas amenazas se pueden introducir en los aparatos conectados e infectar teléfonos, tabletas, PC y otros dispositivos. Por ello, es fundamental instalar un software de seguridad en todos los PC y dispositivos (y usar protección con contraseña) a fin de proteger los datos en caso de que los dispositivos que hay en tu hogar sean blanco de un ataque.

6. Sigue de cerca las amenazas en la red 

Todos los meses, Avast evita unos 2.000 millones de ciberataques contra consumidores. Cientos de millones de esos ataques son únicos, es decir, que nunca antes se habían visto. Se precisa de una constante innovación para ir por delante de los atacantes y garantizar la seguridad de los consumidores, no solo en la red, sino en sus comunidades y hogares. Avast Smart Life es una plataforma de servicios de seguridad para el Internet de las cosas que utiliza inteligencia artificial y aprendizaje automático para detectar y desviar las amenazas con el objeto de defender las redes domésticas. A finales de año, Avast lanzará Avast Smart Home Security, que aprende el comportamiento de los dispositivos conectados y, si dicho comportamiento cambia, te avisa acerca de ataques de botnets, violaciones de la privacidad y amenazas de malware, y neutraliza el ataque. La siguiente gran batalla de la ciberseguridad es proteger el Internet de las cosas, y Avast se encuentra en la primera línea de combate.

Publicado previamente en el sitio web de Reuters Plus.

--> -->