Puede ser vergonzoso ser víctima de un delito, pero recuerda: es muy, muy común.
Tu familia tiene un plan en caso de incendio. Es posible que tenga uno para terremotos u otros desastres naturales. Y, en estos días, es una buena idea tener también un plan de lo que vas a hacer si te hackean.
Porque, lo creas o no, es mucho más probable que tú o un ser querido sean víctimas de una violación de datos, un ataque de phishing, una estafa romántica o uno de los muchos otros delitos cibernéticos que coloquialmente llamamos "hacks" en estos días. Según el Informe sobre delitos en Internet de 2021 (sitio en inglés) del FBI se presentaron cerca de 850 000 denuncias de “pirateos” en 2021, por un total de casi $7 mil millones perdidos. En comparación, hubo alrededor de 338,000 incendios en estructuras de viviendas (sitio en inglés) ese mismo año.
Con eso en mente, queremos brindarte un plan de emergencia breve y agradable sobre qué hacer si tú (o un ser querido) ha sido pirateado. Imprímelo, colócalo junto a tu computadora, colócalo en el refrigerador o guárdalo en algún lugar a la mano para asegurarte de que si eres víctima de un delito cibernético, sabes qué hacer.
1. Cambia tus contraseñas.
El primer paso después de ser víctima de un delito cibernético es cambiar tus contraseñas. Comienza con el servicio que se vio afectado de inmediato, luego dirígete a otros sitios, aplicaciones o servicios en los que hayas usado la misma contraseña. Si todavía tienes dudas, continúa con otras cuentas y cambia esas contraseñas también.
Una herramienta que realmente ayuda a crear, recordar y cambiar contraseñas seguras es un administrador de contraseñas. Descarga uno y comienza a usarlo lo antes posible.
2. Habilita la autenticación de dos factores.
Mientras estés ahí cambiando contraseñas, asegúrate de habilitar la autenticación de dos factores (2FA), si está disponible. 2FA requiere que ingreses no solo tu contraseña, sino también otro factor de autenticación (como un código que se te envió por mensaje de texto) para acceder a una cuenta. Esto agrega otra capa de seguridad a tus cuentas, porque es probable que los ciberdelincuentes que obtuvieron su contraseña no tengan acceso a tus mensajes de texto o correo electrónico, lo que les imposibilita volver a iniciar sesión.
3. Llama a tu banco.
Cuando una cuenta se ha visto comprometida, es posible que tus cuentas bancarias (y otras instituciones financieras) se vean comprometidas. Comunícate con tu banco lo antes posible para informarles lo que sucedió y que deben estar atentos a cualquier actividad sospechosa.
4. Dile a tus amigos y familiares.
Puede ser vergonzoso ser víctima de un delito, pero recuerda: es muy, muy común. Informar a tus amigos y familiares lo que te sucedió no solo los ayuda a estar al tanto de estafas similares, sino que también les advierte que deben estar atentos en caso de que reciban un mensaje extraño de "ti".
5. Informa el incidente a las autoridades correspondientes
Puede ser difícil enjuiciar los delitos cibernéticos después de que hayan ocurrido, pero informar a las autoridades locales correspondientes ayuda a prevenir más delitos en el futuro.